Por: Pedro Rodríguez. Líder regional de Data Centers para América Latina y el Caribe, WSP
El crecimiento de los data centers en Chile ha sido sostenido. Datos del PNUD, ubican al país en el segundo lugar en infraestructura digital en América Latina y el Caribe, con un 13,4%, antecedido por Brasil con un 37,2%.
Uno de los retos es la gestión del recurso hídrico, donde los proyectos en desarrollo han optado por tecnologías de enfriamiento por aire, con circuitos cerrados que minimizan el consumo de agua, y, aunque ha elevado el gasto energético, se ha transformado en un estándar de sustentabilidad.
No obstante, durante 2024 no ingresaron nuevos metros cuadrados de superficie construida ¿Se trata de una pausa preocupante? En absoluto. La industria ha entrado en una nueva fase de maduración.
Muchos de los proyectos aprobados están actualmente en fases tempranas de implementación, con planes de expansión de incluso diez años. La demanda, que tradicionalmente supera a la oferta, parece estar cubierta con los centros ya operativos. Pero la búsqueda activa de nuevos terrenos y los estudios de factibilidad siguen vigentes.
Lo anterior, refleja una industria que se planifica a largo plazo y donde la competencia se da en un nicho técnico altamente especializado. Los desafíos continúan: desde la factibilidad eléctrica de nuevos sitios hasta la adquisición anticipada de equipamientos. Bajo este escenario, la clave es entregar soluciones integrales para cada ciclo de vida de un data center y así, colaborar en el posicionamiento del país como un HUB digital en la región.
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