Informe 2025 de NielsenIQ revela un mercado en transición donde ambas categorías pueden crecer si logran armonizar estrategias y conectar con nuevas prioridades del consumidor
La competencia por el espacio en las góndolas se ha intensificado. Así lo refleja el más reciente informe global de NielsenIQ (NIQ), Finding Harmony on the Shelf: 2025 Global Outlook on Private Label & Branded Products, que revela una creciente preferencia de los consumidores chilenos por las marcas propias.
De esta forma, un 64% de los encuestados en Chile considera que son una buena alternativa frente a las marcas comerciales tradicionales, y el 54% asegura que su calidad es igual o superior.
Este cambio de percepción no es exclusivo de Chile: a nivel global, el 53% de los consumidores están comprando más marcas propias. Sin embargo, el informe también destaca que las diez principales marcas comerciales del mundo lograron un repunte en ventas durante 2024, lo que revela un escenario competitivo donde ambos segmentos —marca propia y comercial— pueden crecer si encuentran formas de colaboración.
“El consumidor chileno cambia continuamente sus hábitos de compra para adaptarse a las condiciones del mercado. Nuestro informe subraya la necesidad crítica de colaboración entre fabricantes y minoristas para impulsar la próxima ola de crecimiento de la industria de consumo masivo”, afirmó Marta Cyhan-Bowles, directora de comunicaciones globales de NIQ.
Tendencias
Entre las tendencias que explican este fenómeno se encuentran la desaparición del estigma asociado a las marcas propias, su creciente percepción de valor —el 63% de los chilenos cree que ofrecen un excelente rendimiento precio-calidad— y una alta disposición a comprar más, siempre que haya mayor variedad disponible (56%).
Además, conceptos como premiumización —el deseo de “darse un gusto” con productos más elaborados— y la apertura a nuevas categorías están redefiniendo la relación entre consumidores y marcas. Más de la mitad de los encuestados en todo el mundo dice estar explorando nuevas opciones, priorizando la necesidad por sobre el nombre en la etiqueta.
En este contexto, el desafío para minoristas y fabricantes es armonizar sus estrategias, sin caer en la competencia directa. Lauren Fernandes, vicepresidenta de Global Thought Leadership de NIQ, señaló: “Nunca ha habido un mejor momento para unir fuerzas y ampliar el tamaño total de la oportunidad. La clave está en programas de copromoción, innovación en valor agregado y mejor segmentación del consumidor”.
Finalmente, el informe revela un crecimiento global del 4,8% en ventas de las principales marcas privadas, superando el 4,3% de crecimiento de marcas propias. Si bien ambas categorías avanzan, el informe enfatiza la necesidad de adaptar las estrategias a cada mercado: mientras en Egipto las marcas propias dominan, en Corea del Sur su aceptación aún es baja.
En Chile, el mensaje es claro: calidad, precio y variedad son claves en la decisión de compra. Y tanto fabricantes como minoristas tienen la oportunidad de aprovechar esta transformación del consumo si logran encontrar armonía en el estante.