Por: Richard Andrade C. Director de Poderyliderazgo.cl

Tanto va el cántaro al agua que termina por romperse… versa un antiguo refrán popular, y es precisamente el juego que están haciendo el gobierno de Sebastián Piñera y los centralistas, de izquierda y derecha, con las elecciones de Gobernadores Regionales.

Hoy nuevamente surgen voces pidiendo aplazar las elecciones, lo hace el Gobierno y los parlamentarios… sí, los parlamentarios que en su mayoría representan a los ciudadanos de regiones, pero que son incapaces de decir no al poder y privilegios que entrega el centralismo.

Pero en este juego, es importante destacar que la Ley 21.074, aprobada por el Congreso y promulgada por este mismo Gobierno el 02 de Febrero de 2018, estableció la dictación e implementación de siete reglamentos, los cuales deben estar vigentes durante el 2020, según consigna la misma ley.

Hasta ahora, el Gobierno ha implementado solo tres reglamentos, el relacionado con la Política Nacional de Zonas Rezagadas; el que establece las abreviaturas para nominación de regiones; y solo recién el pasado 17 de septiembre de este año, el que fija las condiciones, plazos y demás materias concernientes al procedimiento de transferencia de competencias.

Si, a casi 7 meses de las elecciones de Gobernadores Regionales y a sólo 73 días de las eventuales primarias.

A quienes buscan postergar por tercera vez las elecciones de los Gobernadores Regionales, argumentando que las futuras autoridades regionales electas no cuentan con las facultades ni recursos para ejercer sus funciones, por favor no se olviden que el Gobierno de Sebastián Piñera y, por cierto, las coaliciones políticas centralistas, han sido incapaces de sacar adelante leyes tan importantes como la ley de Rentas Regionales.

Recuerden también que aún están pendientes y lo que es peor, sin claridad de fecha definida, los reglamentos claves para el ejercicio de las funciones de los Gobernadores Regionales, a saber:

• Reglamento de marcos e ítems presupuestarios regionales.
• Reglamento que fija el establecimiento de las áreas metropolitanas.
• Reglamento sobre Planes regionales de ordenamiento territorial
• Reglamento sobre normas, integración, funcionamiento del Comité Regional de Ciencia, Tecnología e Innovación de cada Región.

Entonces, entender porque este gobierno en particular plantea cada cierto tiempo la postergación de estas elecciones, claves para el desarrollo de quienes vivimos en regiones, es simple: les aterra tener que enfrentarse a autoridades regionales electas, que en el marco de sus facultades visitarán la Moneda y los Ministerios gestionando y exigiendo recursos para el desarrollo de las regiones.

Al Ejecutivo le resulta complejo hacer “política pública regional” con una autoridad que no pueda manejar a su antojo… se puede hasta entender. Mal que mal, bastantes problemas tiene este Gobierno hoy como para sumarse uno más, pero díganlo de frente y reconozcan de una vez por todas que la Descentralización no está dentro de sus prioridades y mucho menos cuando están a menos de la mitad del mandato presidencial.

Es imperativo que las regiones cuenten con una autoridad que les responda a los habitantes de sus territorios… el actual intendente es el representante del Presidente en la región, sólo se limita a gestionar la voluntad del nivel central, es decir recibe órdenes, informa y nada más. La actual pandemia del coronavirus lo ha hecho más que evidente.

Los parlamentarios tienen por principal función legislar y fiscalizar, no recorrer ministerios ni la Moneda gestionando recursos y/o proyectos para sus regiones.  Los alcaldes, ya bastantes problemas tienen con sus comunas, como para asumir la responsabilidad de una región.

Ya es tiempo de pasar a un modelo de relaciones intergubernamentales, donde cohabiten el gobierno central, el gobierno regional y los municipios, y dejar atrás una administración política del país vertical y jerarquizada, que ignora y desconoce las realidades de las provincias y de quienes vivimos en ellas.

Finalmente, recordarle al Presidente Sebastián Piñera que en su última campaña presidencial, recorrió Chile de norte a sur, de cordillera a mar, autodenominándose como el “Presidente de las Regiones”, lamentablemente los hechos hablan por sí solos.