Reconocimiento fue entregado en el marco de la Exposición Nacional de Caballos de Raza Chilena 2020, realizado en Collipullli
El máximo galardón que un criadero de caballos puede obtener es el Premio Criadero, y esta vez, por segundo año consecutivo lo recibió el Criadero Santa Ana de Melipilla durante XVI Final Nacional de Rodeo para Criadores y Exposición Nacional de Caballos de Raza Chilena – “Collipulli 2020”.
De esta forma, 108 ejemplares de todo Chile llegaron hasta la medialuna Jorge Standen Burgos de Collipulli, donde se premiaron a los mejores ejemplares y criaderos, donde además de dicho galardón, el criadero también obtuvo los premios Reservado Campeón Potrillo (Santa Ana de Melipilla Chico Fachoso), Campeón Potro (Santa Ana de Melipilla Guindao), Mejores Aplomos (Santa Ana de Melipilla, Guindao) y Mejor Presentador (Fernando Cordero).
“Para mí, este fue el premio más importante de esta Nacional, porque los triunfos que obtuvimos acá no se pueden obtener si es que no se reconoce al equipo. Yo siempre he dicho que yo y mi equipo somos uno”. Explica Elizabeth Kassis, dueña del Criadero y directora de la Federación Criadores de Caballos Raza Chilena.
Asimismo, explica que este premio no es al azar, sino que producto de un arduo trabajo durante los 365 días del año en que se busca de la excelencia en la crianza y este galardón nos demuestra que vamos por buen camino. No solo se necesita pasión, ojo, sino que es fundamental el trabajo en equipo.
“Como criadora considero que este es el premio máximo que podemos obtener. Y para coronar, Fernando Cordero recibió el premio a Mejor Presentador lo que me llena de orgullo y demuestra el resultado del trabajo cohesionado a diario y del amor que le tenemos a nuestros caballos e impulsados por la pasión que nos generan. El entusiasmo nos mueve y el trabajo duro día a día es recompensado”.
“Como criadora considero que este es el premio máximo que podemos obtener. Y para coronar, Fernando Cordero recibió el premio a Mejor Presentador lo que me llena de orgullo y demuestra el resultado del trabajo cohesionado a diario y del amor que le tenemos a nuestros caballos e impulsados por la pasión que nos generan. El entusiasmo nos mueve y el trabajo duro día a día es recompensado”.