Uno de cada tres trabajadores en Chile siente que su empleo limita su vida personal. Así lo concluye el Estudio Contexto Pluxee 2025, que analiza las principales tensiones en la experiencia laboral y su impacto en el bienestar y la salud mental.
El informe revela que el 33% de las personas ocupadas declara que su trabajo interfiere directamente con su bienestar personal, mientras que el 47% asegura tener poco tiempo para compartir con su familia y un 49% dice no contar con espacios para mantener vínculos con amigos.
Según Christopher Carvajal, director de Marketing de Pluxee Chile, estos datos confirman un fenómeno estructural, por lo mismo resalta que “El bienestar de los trabajadores hoy va mucho más allá de los beneficios materiales. El desafío está en cómo las organizaciones crean entornos que permitan conciliar la vida personal con los objetivos de productividad. No se trata solo de incentivos, sino de rediseñar la cultura laboral”.
En este contexto, el estudio advierte que el tiempo personal es cada vez más escaso y que esta percepción atraviesa distintos grupos etarios y sectores productivos.
Teletrabajo, presencialidad y convivencia laboral: aprendizajes en disputa
El estudio también constata un retroceso sostenido del teletrabajo en el país. Solo un 18% de los trabajadores mantiene alguna modalidad remota, frente al 29% registrado en 2023.
Aunque quienes teletrabajan declaran dedicar más tiempo a sus familias (42%), también reconocen mayores niveles de estrés (60%) y dificultades para separar lo personal de lo laboral (52%).
Para Carvajal, estos resultados muestran que “la flexibilidad no es un privilegio, sino una herramienta estratégica si se gestiona adecuadamente”, agregando que “en un contexto donde la salud mental cobra cada vez más relevancia, las empresas deben repensar cómo equilibran productividad y bienestar personal”.
En materia de convivencia, el informe señala que el 80% de los trabajadores declara mantener buenas relaciones con sus compañeros, pero esas conexiones se debilitan fuera del horario laboral: un 44% dice no compartir nada o casi nada con colegas. Esto confirma que los espacios informales han perdido protagonismo tras la pandemia y el retorno a la presencialidad.
Brechas y discriminación: el otro frente de la cultura organizacional
La investigación también aborda las percepciones de discriminación en el entorno laboral. El 46% de los trabajadores declara haber sido discriminado salarialmente, seguido por la falta de ascensos (28%) y la asignación desigual de tareas (27%).
Entre las causas más mencionadas aparecen el parentesco (35%), la apariencia física (32%) y la tendencia política (25%), además de factores como enfermedad, género y embarazo.
A juicio de Carvajal, estos datos muestran que las empresas deben asumir un rol más activo. “La convivencia, la conciliación y el respeto a la diversidad deben transformarse en pilares reales de la cultura laboral”, enfatiza. Y advierte: “Si no avanzamos en estos puntos, el costo lo seguirán pagando tanto las personas como las propias organizaciones, porque la exclusión termina afectando productividad y compromiso”.
Hacia un nuevo modelo laboral centrado en bienestar y equidad
El Estudio Pluxee 2025 concluye que la flexibilidad, la salud mental y la inclusión se posicionan como ejes estratégicos para el desarrollo organizacional. Para las empresas, esto significa avanzar hacia modelos que integren la conciliación como una política estructural y no como un beneficio puntual.
El informe invita a abrir un debate sobre cómo construir entornos laborales más sostenibles, donde el bienestar no sea una variable secundaria, sino un factor determinante para la productividad y la retención de talento.
El cuarto módulo del estudio Contexto Pluxee 2025 está disponible en www.pluxee.cl/estudio-contexto-2025, con información detallada sobre percepciones, brechas y oportunidades del entorno laboral chileno.