La comisión de Salud del Senado aprobó este martes, por tres votos a favor y dos en contra, la idea de legislar sobre el proyecto de Muerte Digna y Asistencia Médica para Morir, iniciativa que permitirá a personas con enfermedades graves, incurables o en estado terminal solicitar ayuda médica para morir de manera digna y sin dolor.
El senador Juan Luis Castro, representante de la región de O’Higgins e integrante de la comisión, destacó el avance en la tramitación del proyecto, subrayando que busca garantizar el derecho de las personas a decidir sobre sus últimos días, con respaldo médico, peritajes y garantías éticas.
Requisitos y garantías del proyecto de ley
El parlamentario explicó que la iniciativa establece requisitos estrictos para su aplicación: la persona debe ser mayor de edad, consciente y lúcida, contar con diagnóstico confirmado por varios especialistas y evaluación psiquiátrica, y manifestar su voluntad por escrito en presencia de testigos y ministro de fe.
Castro enfatizó que el proyecto no impone la práctica a nadie y respetará la voluntad de cada paciente, señalando que “Jamás va a haber un menú en la carta para andarse suicidando, como algunos plantean erróneamente”. Según el senador, el objetivo es aliviar el sufrimiento persistente e intolerable de quienes ya no tienen posibilidad de recuperación.
Llamado a discusión inmediata en el Congreso
El senador solicitó al Gobierno dar urgencia inmediata al proyecto, asegurando que no quede en espera junto a otros proyectos en estado de tabla para la sala. “Esto ya no puede tener más dilación. El Gobierno debe permitir que en los próximos días se vote en definitiva en la sala y tengamos el veredicto de todo el Senado”, indicó.
Castro resaltó que la iniciativa cuenta con respaldo ciudadano y que busca garantizar derechos de decisión en condiciones de dignidad y humanidad, sin obligar a ninguna persona ni alterar protocolos médicos existentes. La propuesta está orientada a que los pacientes terminales puedan ejercer su derecho a la muerte asistida bajo estrictos estándares legales y médicos.
El proyecto ahora continuará su tramitación en el Senado, donde el llamado a discusión inmediata podría acelerar su votación definitiva, marcando un hito en la legislación chilena sobre muerte digna y eutanasia.