La Empresa Portuaria Chacabuco (Emporcha) y la Universidad de Aysén concretaron un acuerdo que busca fortalecer la colaboración entre el sector productivo y el mundo académico, con el objetivo de impulsar investigación aplicada, formación profesional e innovación sostenible en la Patagonia.
La firma del convenio contó con la participación del gerente general de Emporcha, Felipe Candia; el presidente del directorio, Enrique Runin; el administrador provisional de la Universidad de Aysén, Juan Pablo Prieto Cox; el director general de vínculos, Gabriel Núñez; y la jefa del departamento de ciencias naturales y tecnología, Paulina Flores, junto a académicos de la institución.
En la jornada, las autoridades realizaron un recorrido por las instalaciones portuarias y el remolcador eléctrico Trapananda, el primero en Sudamérica en su tipo, considerado un referente de innovación portuaria y compromiso ambiental.
Innovación, capital humano y sostenibilidad en el acuerdo
El convenio contempla acciones concretas: potenciar proyectos conjuntos de investigación aplicada, promover prácticas profesionales, aportar capital humano al desarrollo regional e impulsar energías limpias y sustentabilidad en el puerto de Chacabuco.
El gerente general de Emporcha, Felipe Candia, destacó que “la firma del convenio de cooperación con la Universidad de Aysén resulta un hito positivo para la portuaria estatal, ya que permite fortalecer el plan de sostenibilidad 2024-2026 y aportar a la formación de profesionales en la región”.
Candia agregó que la colaboración académica será clave en “proyectos de energía renovable y en la generación de indicadores que reflejen la realidad local del puerto”.
Desde la academia, el administrador provisional de la Universidad de Aysén, Juan Pablo Prieto, enfatizó que “este convenio involucra prácticas de nuestros estudiantes, trabajos conjuntos, investigaciones y la formación del personal del puerto, configurando una asociación virtuosa al servicio de la región”.
Prieto subrayó además la relevancia de vincular a los estudiantes con procesos productivos locales: “la universidad debe estar cerca de Emporcha, donde se desarrollan actividades que marcan la vida económica de Aysén y sus habitantes”.
Proyección del trabajo conjunto en Aysén
Uno de los principales ejes será la implementación de proyectos de energías limpias, en línea con la meta de descarbonización asumida por la industria portuaria y por la propia Emporcha. También se buscará generar información técnica para la toma de decisiones y consolidar un trabajo estable entre ambas instituciones.
“Estamos muy contentos de concretar la firma de este convenio y no tenemos duda de que nos quedan muchos desafíos por diseñar y acordar”, afirmó Candia, resaltando que este marco formal de cooperación permitirá dar continuidad y estabilidad a las iniciativas conjuntas.
De esta forma, la alianza entre Emporcha y la Universidad de Aysén se presenta como un paso clave para fortalecer la innovación, la sostenibilidad y la formación de capital humano en la Patagonia, aportando al desarrollo regional con visión de largo plazo.