Con la participación de representantes del sector público, privado y académico, el proyecto BioAysén, apoyado por CORFO y liderado por la Fundación Chile Circular, celebró una nueva sesión del Observatorio de Biodiversidad y Valorización del Capital Natural, instancia clave para fortalecer su gobernanza y definir los próximos pasos de esta iniciativa pionera en conservación y sostenibilidad.
Durante la jornada se presentaron los avances técnicos y se informó que cuatro terrenos serán incorporados al Banco de Biodiversidad hacia fines de 2025, a través de una plataforma digital abierta. En marzo de 2026 se sumarán tres nuevos terrenos pertenecientes a la Fundación Kreen, Fundación Patagonia Aysén y CMPC, consolidando el primer banco de biodiversidad del país basado en pagos por servicios ecosistémicos.
El director ejecutivo de la Fundación Chile Circular, Gonzalo Pumarino, destacó que este avance “marca un antes y un después en la forma en que Chile entiende la conservación”.
“Serán siete los primeros terrenos que podrán ingresar a nuestra plataforma. Dos de ellos iniciarán un modelo de certificación de servicios ecosistémicos con apoyo del FSC. Es un paso clave para avanzar hacia proyectos que integren preservación de la biodiversidad con modelos de retribución económica sostenible”, afirmó.
Primer proceso de certificación ambiental con apoyo del FSC
Otro hito destacado es el inicio del proceso de certificación de servicios ecosistémicos en dos terrenos piloto, que comenzará en noviembre con el respaldo del Forest Stewardship Council (FSC). Este proceso permitirá validar experiencias concretas de conservación que generen ingresos locales y promuevan la protección efectiva del capital natural de Aysén.
La gerenta de Transforma Cambio Climático, Irina Reyes, señaló que la innovación del proyecto “no solo radica en la tecnología o en la valoración económica, sino en su modelo de gobernanza”.
“Que actores públicos, privados y fundaciones se sienten en la misma mesa para decidir cómo cuidar y financiar la biodiversidad de Aysén demuestra que la conservación puede convertirse en motor de desarrollo regional”, puntualizó.
Desde la gobernanza del proyecto se reafirmó el compromiso de seguir fortaleciendo el modelo y avanzar hacia la implementación de un piloto OMEC (Otras Medidas Efectivas de Conservación Basadas en Áreas), que permitirá compatibilizar actividades productivas sostenibles con la protección de ecosistemas.
Pumarino agregó que “BioAysén ha logrado sumar apoyos de expertos nacionales e internacionales, así como del Gobierno Regional, CONAF, el Consejo del Salmón y propietarios locales. El proyecto demuestra que conservación y desarrollo pueden ir de la mano, generando nuevas oportunidades económicas para Aysén y el país”.


