En un contexto marcado por los desafíos de la transición energética y la necesidad de fortalecer la gobernanza técnica, Bernardita Espinoza fue elegida vicepresidenta del Consejo Directivo del Coordinador Eléctrico Nacional, a solo un año de haber ingresado como consejera.
Su nombramiento no solo reafirma su liderazgo en la industria, sino que también consolida la presencia femenina en espacios de toma de decisiones históricamente dominados por hombres.
“Este nuevo rol representa una gran responsabilidad, pero también una oportunidad para profundizar el trabajo por un sistema eléctrico resiliente, justo y a la altura de los desafíos de la transición energética que Chile requiere. Se trata de avanzar con decisión, pero también con diálogo y apertura hacia todos los actores que conforman el ecosistema energético”, afirmó Espinoza.
Un liderazgo técnico con mirada de país
Con más de 30 años de experiencia en los sectores minero y energético, Espinoza ha impulsado una visión de desarrollo basada en la planificación estratégica de largo plazo, el fortalecimiento institucional y la incorporación de criterios de sostenibilidad en la toma de decisiones. Su trayectoria combina gestión pública y privada, lo que le otorga una mirada integral sobre los equilibrios que requiere el sistema eléctrico nacional.
Durante su primer año como consejera, ha enfatizado que la autonomía del Coordinador Eléctrico Nacional debe entenderse como un principio estructural. “Sin independencia técnica no hay confianza ni estabilidad. Las decisiones sobre planificación y operación deben basarse en evidencia y análisis, no en presiones coyunturales. La técnica tiene que estar al servicio de las personas y del país, con decisiones informadas, responsables y construidas desde el diálogo”, sostuvo.
Espinoza ha destacado que la gobernanza del sector eléctrico necesita incorporar con mayor fuerza una visión de largo plazo que combine seguridad de suministro, incorporación de energías renovables y resiliencia del sistema frente a eventos climáticos y tecnológicos.
Transición energética con enfoque inclusivo
Desde su nuevo cargo, Espinoza buscará fomentar una cultura de diálogo abierto y constructivo entre la academia, la industria, el Estado y la ciudadanía. Su objetivo es avanzar hacia una planificación energética participativa, donde los distintos actores colaboren en el diseño de un sistema capaz de responder a los desafíos sociales, ambientales y tecnológicos que enfrenta Chile.
“La transición energética no puede construirse en silos. Requiere colaboración, coordinación y compromiso colectivo. Solo así lograremos un sistema que combine eficiencia técnica, sostenibilidad ambiental y legitimidad social”, subrayó la vicepresidenta del Consejo Directivo.
En su visión, el proceso de transformación energética debe ser gradual pero firme, garantizando seguridad en el abastecimiento eléctrico y manteniendo la competitividad del país. “El futuro energético de Chile se construye con visión compartida y responsabilidad. No basta con planificar, hay que ejecutar con sentido de propósito y coherencia entre la política pública y las necesidades reales del territorio”, enfatizó.
Su designación también representa un avance en materia de diversidad y equidad de género dentro del sector energético. La incorporación de mujeres en espacios de decisión no solo amplía la mirada estratégica, sino que fortalece la representatividad en un ámbito clave para el desarrollo económico y ambiental del país.


