El presidente del CUECH reiteró la necesidad de un financiamiento basal a las Universidades Públicas y terminar con el voucher, reafirmando a la vez que las dieciocho universidades que integran el organismo apoyan realizar cambios a la Ley 19.628 sobre protección de la vida privada
El presidente del Consorcio de Universidades del Estado de Chile, rector Ennio Vivaldi, apoyó la modificación a la Ley N° 19.628 que termina con la publicación de deudas educativas que publica DICOM.
El proyecto de Ley fue presentado en enero pasado por la presidenta de la Comisión del Senado, Yasna Provoste, los senadores Juan Ignacio Latorre, Jaime Quintana, Carlos Montes, la diputada Camila Rojas y la agrupación Deuda Educativa.
El vocero de las dieciocho universidades del Estado afirmó ante la Comisión de Educación del Senado, que “la medida va en la dirección correcta pero no soluciona el problema de fondo: el mecanismo de financiamiento de las instituciones de educación superior”.
El presidente del CUECH reiteró la necesidad de rediscutir el financiamiento de las 18 universidades del estado señalando que “resulta totalmente incomprensible que el Estado financie a sus propias universidades con la lógica del Voucher. Este método solo tiene sentido para asignar recursos públicos a privados y se basa en premisas de consumidor informado, libre competencia y proyectos alternativos que han sido demostrados radicalmente falsos” afirmó el rector Ennio Vivaldi.
Además, el rector Vivaldi puntualizó que el financiamiento del Estado a sus universidades debe consistir en “aportes directos, asignados por criterios bien definidos y coherentes: desempeño, pertinencia y metas sinérgicas con las de las instituciones sectoriales públicas a nivel estatal y regional”.
Chile posee uno de los aranceles de pregrado más altos de la OCDE US$ 5.885, muy superior a Japón US$ 5.019 o Estados Unidos US$ 5.402 (Fuente: Education At a Glance 2014. OCDE 2014); así como una baja tasa de titulación de las instituciones privadas (Fuente: 41% entre 2007-2015, Estudio de Patricio Basso), lo que sumado al incremento en las deudas limitan el acceso a la educación. Según datos de la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras de 2018, en una década el número de estudiantes endeudados pasó de 291.776 a 722.035 (2007-2017).
En este contexto, el presidente del CUECH aseguró que “las deudas contraídas en materia de educación sean objeto de publicaciones en boletines comerciales es contraria al rol del Estado de garantizar el acceso a la educación”. Al estigmatizar a los estudiantes les dificulta aún más obtener recursos para pagar las deudas situación que puede ser resumida en el aforismo: “agregar al daño el insulto”.
