La gerencia de LATAM Airlines puso fin este martes al proceso de mediación legal que llevaba adelante la Dirección del Trabajo (DT), forzando el inicio anticipado de la huelga de sus pilotos. La decisión, calificada de “prematura e inexplicable” por el Sindicato de Pilotos de LATAM (SPL), ocurre cuando a la negociación le restaban aún cinco días hábiles de conversaciones si la empresa hubiese aceptado la prórroga que permite la ley.
El conflicto se enmarca en un contexto financiero favorable para la aerolínea, que en los últimos 18 meses ha acumulado US$ 1.500 millones en utilidades, mientras mantiene congeladas las condiciones laborales reducidas en 2020 para enfrentar la crisis del sector. Según el sindicato, la negativa de la empresa a restituir esas condiciones y su decisión de cerrar el diálogo “empujaron deliberadamente este proceso hacia la huelga”.
El presidente del SPL, Mario Troncoso, explicó que los pilotos venían advirtiendo esta situación desde mediados de octubre. “Somos un sindicato profesional, integrado por personas con décadas en la compañía, muchos de ellos hijos y nietos de pilotos de la antigua LAN Chile, y nos resulta incomprensible que la dirección de la empresa haya optado por llevarnos de la mano a una huelga que siempre consideramos evitable si se comparan las ganancias obtenidas con la moderación de nuestras demandas”, señaló el dirigente.
Huelga se activa en vísperas del reporte financiero de LATAM
El 3 de noviembre, el 97% de los pilotos rechazó la última propuesta económica de la compañía, que no presentó variaciones significativas respecto de la oferta inicial formulada a mediados de año. Con ello se abrió un período de mediación legal que, de haberse extendido, podría haber llegado hasta el 18 de noviembre. Sin embargo, la empresa decidió no continuar con las conversaciones, precipitando el inicio de la huelga a partir de esta medianoche.
Troncoso sostuvo que LATAM busca evitar que el conflicto coincida con la publicación de sus resultados financieros, programados originalmente para el 5 de noviembre y trasladados al 14 de noviembre. “Nos parece evidente que la administración no quiere explicar a la opinión pública un conflicto con sus trabajadores justo cuando reporta las utilidades más altas de su historia”, afirmó.
En el comunicado difundido por el SPL, los pilotos acusan además que la compañía se negó a transparentar las cifras económicas que respaldan su oferta y no cumplió su compromiso de devolver las condiciones laborales previas a la pandemia.

“Durante cinco años hemos sostenido una rebaja temporal de remuneraciones que se transformó, en los hechos, en permanente. Ese aporte equivale a unos US$ 70 millones y representó un esfuerzo significativo en tiempos de crisis”, detalló Troncoso.
El costo total de las demandas planteadas por el sindicato —según los propios cálculos de los pilotos— representa menos del 1% de las ganancias obtenidas por la aerolínea en los últimos 18 meses y no afectaría de manera significativa el CASK ex-fuel, indicador que mide el costo por asiento-kilómetro disponible. “Hablamos de una negociación acotada, de magnitudes totalmente razonables frente a los resultados financieros de la compañía”, insistió el dirigente gremial.
Un conflicto que pone presión sobre la gestión corporativa
La paralización de las operaciones de una de las doce aerolíneas más grandes del mundo se produce, así, en un escenario de alta rentabilidad para LATAM. En términos comparativos, las utilidades acumuladas por la firma en el último año y medio son equivalentes al costo de construcción de cinco hospitales de alta complejidad en Chile.
Para el sindicato, la falta de voluntad de diálogo se contradice con el discurso corporativo de sostenibilidad y respeto a las personas. “Los pasajeros, los inversionistas y las AFP que tienen participación en la empresa deben saber cómo se condujo este proceso. Mientras nosotros apostamos por una negociación responsable, la compañía optó por cerrar la puerta y trasladar vuelos a filiales, una acción que consideramos reemplazo de trabajadores en huelga”, sostuvo Troncoso.
Con la huelga en curso, los efectos operativos y reputacionales para la compañía podrían ser significativos, especialmente en rutas regionales y domésticas. El SPL ha indicado que mantendrá su disposición al diálogo si la empresa manifiesta voluntad real de alcanzar un acuerdo equilibrado.


